ELCÓAZ: SAN PEDRO Y FRANCIS BARTOLOZZI
Por Simeón Hidalgo Valencia (29-06-2014)
El desconocido valle navarro de Urraúl Alto merece una visita como la
que desde la Asociación Grupo Valle de Izagaondoa impulsamos en nuestras
actividades para dar a conocer el patrimonio de la Comarca de Izaga, y como
desde esta zona de Navarra se divisa altiva la Peña de Izaga, hasta Urraúl-Alto
nos dirigimos el sábado, día 28 de Junio de 2014.
Esta visita se la prometí a los habitantes del valle, visitado el año
pasado cuando me invitaron, desde su Ayuntamiento, a impartir una charla que
dinamizara la actividad cultural del verano. Se me ocurrió que sería un buen
tema hablarles sobre el Patrimonio del Valle de Urraúl Alto y sus recursos
turísticos, pues después de recorrerme prácticamente la totalidad del valle
descubrí que hay una buena e interesante materia prima para ponerla en el
circuito cultural y turístico.
Como lo que se promete hay que cumplirlo para que los hechos estén
acordes con las palabras, ayer, víspera de la fiesta de San Pedro, visitamos
los lugares de Santa Fe, Elcóaz, Aristu, Ayegui, Jacoisti, Ongoz, Irurozqui,
Imirizaldu, Adoáin y Zabalza alrededor de 40 personas causando una pequeña
revolución por allí donde pasamos pues una caravana de coches invadieron estas
pequeñas poblaciones.
Al visitar Elcóaz pudimos contemplar su iglesia románica dedicada a San
Pedro y pensé que sería interesante empezar por comentar en mi blog este hito
de la Ruta Románica que estábamos realizando, dado que al día siguiente se
celebraba su fiesta y es lo que hago en este momento de la tarde.
Lo decidí porque junto a los detalles románicos de su iglesia,
construida a finales del siglo XII o comienzos del XIII, hay un elemento muy
interesante que señalar plasmado sobre la cabecera plana de la misma pintado
por Francis Bartolozzi [1] que hace relación a la
vida del apóstol San Pedro… y ya que estamos en su día, ¡qué menos que
recordarla desde los pinceles de una gran artista!
Los cinco canecillos modernos de mediados del Siglo XX.
El público asistente seguía mis explicaciones y comentarios con
interés, quien sacando fotos de estas pequeñas y sencillas esculturas populares
del alero, quien tomando incluso hasta apuntes, quien echando una ojeada y
admirándose de la hermosura paisajística que desde este lugar se divisa, quien,
un grupo de montañeros que asistió a la visita, con ganas de llegarse andando
hasta el nacedero del río Areta que surca el valle, y todos admirados por esta
joya románica en un pequeño lugar alejado de la civilización.
La admiración subió de tono al entrar en la iglesia y contemplar de
golpe las hermosas pinturas realizadas con ocasión de su restauración, allá por
el año 1957 y al sentir que en cierta medida, parece que en ese año se paró el
tiempo para esta iglesia.
Se explica que estas pinturas se deben a que el titular de esta iglesia
es San Pedro y de su vida se muestran algunas escenas. Que su autora principal
fue la pintora Francis Bartolozzi, casada con el pintor navarro Pedro Lozano de
Sotés, firmante también de la obra realizada en MCMLVII, con la colaboración de
los niños Pedro Mory, Mª de la Real, Mª del Mar y Rafael.
Esta otra escena representa la profesión de Simón (luego Pedro), que
junto a sus hermanos Santiago y Juan era pescador. Jesús se sube a la barca de
Pedro y le dice que reme mar adentro y después de hablar a las gentes, le
invita a echar las redes y pescar. Pedro le dice que han estado todo la noche y
no han pescado nada, pero echa las redes.
Al final le dice Jesús que desde ese momento sería “pescador de
hombres”.[3]
Si se observa con atención debajo de la escena de la predicación
aparece la firma de la pintora y de su marido.
La escena inferior derecha representa la muerte de Pedro a quien según
la tradición se le crucifica cabeza abajo porque, según él lo pidió, no era digno de morir de la misma forma que
Jesús, al que había negado.
Ocupa el centro de la pintura la figura del apóstol San Pedro con la
leyenda “SANCTUS PETRUS”.
En su mano izquierda porta las simbólicas llaves del Reino de los
Cielos.
“A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la
tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará
desatado en los cielos.”[4]
Otro detalle más se pinta en la iglesia y se sitúa al fondo de la misma
para realzar la pila bautismal.
Sobre ella se representa la figura de una paloma simbolizando al
Espíritu Santo y debajo de ella una concha de peregrino, como instrumento para
derramar el agua bautismal en el momento del bautismo.
Como vemos, estas bonitas y artísticas pinturas de 1957 se combinan muy
bien con el edificio medieval y como él son parte del patrimonio del valle de
Urraúl Alto.
Hoy es la festividad de San Pedro y en muchos lugares se celebran
fiestas. También en Elcóaz es el día de sus fiestas, aunque me temo que pasarán
en silencio como en otros muchos lugares, casi despoblados, de esta zona del
prepirineo navarro.
Si alguna vez te acercas por estas tierras no olvides que, rodeada de
la belleza de la Naturaleza, en Elcóaz hay un hito románico digno de admirar y
de conocer y que dentro de su recinto nos espera la obra de Francis Bartolozzi
contándonos la vida de San Pedro con hermoso colorido.
[1]Francis Bartolozzi
Sánchez http://www.euskomedia.org/aunamendi/11631
[2] Lucas 22, 31-34
[3] Lucas 5, 1-11
[4] Mateo 16, 19.