LIZOAIN-ARRIASGOITI: JOAQUÍN RESANO. ANTOLOGÍA
Por Simeón Hidalgo Valencia (03 de Diciembre de 2015)
Medio siglo hace ya en que este gran pintor de la denominada Escuela de
Pamplona, comenzó a iniciarse en el arte del dibujo y de la pintura en la Escuela
de Artes y Oficios del Ayuntamiento de Pamplona.
Su presencia en el ambiente cultural a lo largo de estos años se ha
manifestado a través de sus exposiciones en la capital, pero hoy, J. Resano
busca el sabor rural y la paz que se respira alejado del bullicio de las gentes
y pinta lo que “me apetece” y muestra
la intimidad de su casa y de su familia.
Atrás queda su etapa de casi 20 años de Cuadros Pop y el cambio que dio
a su trabajo a través de “ejercicios”
en que pasa a la “pintura realista”,
para centrarse después en las “personas”
a las que capta con su cámara “sin que se
dieran cuenta”, para pasar a su etapa de los “entremeses” fueran “dulces,
amargos o salados” realizando “cada
cuadro de una manera diferente”, para pasar en el momento actual a coger
los pinceles cuando siente su llamada, para pintar como ya se ha dicho lo que
le apetece.
Medio siglo hace ya en que este gran pintor reconocido de Navarra
inició su andadura y después de 50 años, ayer, día 3 de Diciembre, inauguró su
enésima exposición, pero esta vez en un marco muy distinto del de la Ciudadela
de Pamplona. Esta vez, gracias a la gran labor cultural que se realiza en Lizoain-Arriasgoiti,
a través de la Comisión de Cultura, expone en el “Centro Cultural ELIZAR
kulturgunea”, sito en la que fue iglesia de San Miguel de Lizoain.
Restaurada con algunas ayudas oficiales y sobre todo con el trabajo en
auzolan de los vecinos voluntarios, muestra estos días, desde el 3 de Diciembre
al 3 de Enero-2016, todos los sábados de 12 a 14 h. y de 16 a 18 h. y los Domingos y
festivos de 12 a
14h. una Antología de este vecino, que empezó con 15-16 años a tomarse en serio
su afición pictórica, aunque “no he
vivido de la pintura, sino de los distintos trabajos que he tenido a lo largo
de mi vida laboral”.
Yo suelo comentar, siempre que la ocasión me lo brinda, que rehabilitar
un edificio de estas características patrimoniales, no es para olvidarse de él
después de haberlo remozado, como a veces sucede, sino para integrarlo en el
circuito cultural y darle vida a través de actividades de esta naturaleza, sean
exposiciones, conciertos, conferencias, presentaciones de libros, sesiones
cinematográficas,… y todo aquello que las inquietudes e iniciativas de los
vecinos consideren oportunas.
Son recursos básicos que crean una infraestructura cultural y a la vez
turística, si se gestiona con decisión y miras de futuro, de primera necesidad
para un valle y comarca necesitada de un plan general de revitalización que
saque de la depresión, de la despoblación, del envejecimiento y de la endogamia
municipal que se percibe a simple vista.
Una comarca como la Mancomunidad Izaga debería plantearse seriamente su
futuro y coordinar y apoyar también económicamente las iniciativas culturales y
turísticas que en los diferentes municipios que la integran se realizan.
Patrimonio histórico y recursos naturales hay en abundancia. Si se saben
impulsar acciones atrayentes la gente responde, y no sólo los vecinos, sino
también del resto de Navarra y de otras
Comunidades del Estado. Lo digo por experiencia y eso mueve la cultura,
mueve el turismo, mueve la economía y en ocasiones hasta mueve la demografía.
Voluntad y ganas en las distintas corporaciones unidas en esta empresa es lo
que hace falta.
Poner en la Agenda Cultural de Navarra todas estas iniciativas, como la Antología
pictórica de J. Resano es básico para darla a conocer. (He consultado la Agenda
de Ocio y Cultura y no aparece anunciada)
Es realmente interesante de ver esta Antología y yo, que he estado en
la inauguración, se la recomiendo a mis lectores a la vez que felicito a la
Comisión de Cultura de Lizoain-Arriasgoiti por esta iniciativa y por otras que
me he enterado tienen “in mente”.
¡A por ellas!
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